Mañana de sábado lluviosa. Hoy también estoy tranquila.
Cuesta acostumbrarse a esto de estar tranquila. Existe una mezcla de incertidumbre, desconfianza y la verdad, me importa todo un pimiento. Los bordes de los ataques de nervios no están tan lejanos, y es inevitable, no puedo creer aún que vaya a durar demasiado. Aún así, sonrío satisfecha: ¿no era esto lo que quería? ¿no es esto por lo que peleo y resisto?
En cualquier caso, la experiencia es interesante. Veo, oigo, pienso y siento cosas que no había podido percibir sin esta traquilidad. Cosas sencillas, pequeñas cosas, lo que encierra la normalidad de los días, cuando éstos se presentan "normales". Riqueza invisible y claro, desperdiciada.
Carpe diem! Si hasta creo que estoy feliz.
Cuesta acostumbrarse a esto de estar tranquila. Existe una mezcla de incertidumbre, desconfianza y la verdad, me importa todo un pimiento. Los bordes de los ataques de nervios no están tan lejanos, y es inevitable, no puedo creer aún que vaya a durar demasiado. Aún así, sonrío satisfecha: ¿no era esto lo que quería? ¿no es esto por lo que peleo y resisto?
En cualquier caso, la experiencia es interesante. Veo, oigo, pienso y siento cosas que no había podido percibir sin esta traquilidad. Cosas sencillas, pequeñas cosas, lo que encierra la normalidad de los días, cuando éstos se presentan "normales". Riqueza invisible y claro, desperdiciada.
Carpe diem! Si hasta creo que estoy feliz.